Problemas entre padres e hijos: cómo resolverlos

La crianza de los hijos es el trabajo más satisfactorio que jamás tendremos, pero no está exento de desafíos. La vida familiar moderna puede ser estresante y, con diversas presiones para las familias, no siempre es fácil. A pesar de los mejores esfuerzos de los padres,  pueden surgir problemas entre padres e hijos. 

Estos problemas pueden comenzar cuando un niño es pequeño o desarrollarse a medida que el niño crece y entra en diferentes etapas de desarrollo. Por ejemplo, una adolescente puede mostrar una falta de respeto por sus padres cuando comienza a ser más egocéntrico y a depender más de sus amigos que de su familia. 

Algunos problemas requieren un poco más de tiempo y atención enfocada para hacerlos desaparecer, mientras que otros pueden requerir que los padres cambien drásticamente su estilo de crianza y cómo interactúan con sus hijos a diario.

En última instancia, los padres quieren lo mejor para sus hijos y una relación sólida entre padres e hijos puede ayudar a generar mejores resultados para los niños. Por eso, desde Hernández Psicólogos Málaga te hablamos de cómo resolver los problemas entre padres e hijos.

Problemas más comunes entre padres e hijos

Las disputas familiares se centran principalmente en: 

• Rutinas y horarios: tareas domésticas, vuelta a casa, hora de dormir, salud e higiene, alimentación, administración del dinero, etc.
• Personalidad: la imagen, forma de ser o modo de comportarse.
• Obligaciones escolares: tareas escolares, rendimiento académico, etc.
• Relaciones interpersonales: amistades, actividades, etc.

El conflicto puede tener un carácter más o menos agudo dependiendo del manejo y del estilo de comunicación que establezcan los padres con el niño o adolescente.

¿Qué hacer cuando hay problemas con los hijos?

Cuando sabes que algo no marcha bien y que existe un conflicto entre tú y tu hijo, ya estás en el primer paso para buscar la solución. Ser consciente hará que puedas elegir la técnica adecuada para solucionar el problema evitando los daños emocionales.

Algunas de las mejores técnicas para resolver conflictos son:

1. Escucha activa. Darle la oportunidad de expresarse y escuchar su opinión es el primer paso para encontrar la solución.
2. Busca soluciones de forma conjunta aportando la perspectiva de ambos y respetando la opinión del otro.
3. Expresa los sentimientos en un clima de aceptación y comprensión.

Juzgar, evitar hablar de sentimientos o cambiar de dirección hacia el beneficio de uno mismo sin tener en cuenta los sentimientos del otro, puede poner en peligro una relación adecuada entre una parte y otra.

Pautas de resolución de conflictos 

• Mantén la calma, recuerda que eres el ejemplo de tus hijos.
• Deja que explique sus sentimientos y confía en él.
• Acepta las emociones, las tuyas y las de tu hijo.
• Si se comporta mal, hazle saber cómo te sientes y las consecuencias que tendrán sus actos.
• Respeta su opinión, sus necesidades no son menos importantes que las tuyas. Dale el tiempo y el espacio que se merece.
• Establece normas y límites si existen comportamientos inadecuados, sé firme en esto.
• Si la situación se vuelve muy tensa, déjalo para más tarde. Cuando no estéis tan enfadados podréis retomar la conversación.
• Si tienes que pedir disculpas, hazlo. No es ser débil, es ser valiente y afrontar los errores cometidos.

Libros que pueden ayudar a resolver conflictos entre padres e hijos

¿Por qué es importante una relación positiva entre padres e hijos? 

La relación padre-hijo es aquella que nutre el desarrollo físico, emocional y social del niño. Es un vínculo único que todos los niños y padres podrán disfrutar y nutrir. Esta relación sienta las bases para la personalidad del niño, las elecciones de vida y el comportamiento general. También puede afectar la fortaleza de su salud social, física, mental y emocional. 

Algunos de los beneficios incluyen:

• Los niños pequeños que crecen con un apego seguro y saludable a sus padres tienen más posibilidades de desarrollar relaciones felices y satisfechas con otras personas en su vida.
• Un niño que tiene una relación segura con sus padres aprende a regular las emociones bajo estrés y en situaciones difíciles.
• Favorece el desarrollo mental, lingüístico y emocional del niño.
• Ayuda al niño a exhibir comportamientos sociales optimistas y seguros.
• La participación e intervención saludables de los padres en la vida diaria del niño sientan las bases para mejores habilidades sociales y académicas.
• Un apego seguro conduce a un desarrollo social, emocional, cognitivo y motivacional saludable. Los niños también adquieren sólidas habilidades para resolver problemas cuando tienen una relación positiva con sus padres.

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Reconstruir una relación positiva con un hijo o hija requiere tres componentes principales: amor, estructura y tiempo. Los niños necesitan un equilibrio de cosas para crecer y prosperar. Necesitan amor y calidez, y también necesitan estructura y coherencia. 

Sin embargo, algunos problemas de relación entre padres e hijos pueden requerir la intervención de un profesional. 

¡No tires la toalla! En Hernández Psicólogos te ofrecemos soluciones a los conflictos con tus hijos a través de la Terapia familiar con un Psicólogo experto en esta área.

Además, para más comodidad puedes elegir un Psicólogo Online, tan eficaz como presencial.

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