Psicólogos en Málaga desde 2008

¿Todas las terapias son personalizadas?

Tu tratamiento es único, 100% personalizado.

No eres el motor de un coche.

Cuando un motor se estropea, cualquier mecánico del mundo puede localizar la avería en más o menos tiempo y apretar la tuerca igual que en el resto de vehículos del mismo modelo. No tiene pérdida, dentro de su complejidad.

Tú eres una persona única en el mundo, con diferentes niveles mentales, físicos, sociales, laborales, emocionales... Apretar una “tuerca” puede aflojar otra al mismo tiempo si no sabes lo que estás haciendo. Por eso recibes una terapia psicológica integradora y específica para tu situación con un psicólogo cognitivo conductual.

Para nosotros, desde nuestros centros, el enfoque integrador no es una moda pasajera ni otro adorno que mostrar en nuestro escaparate. Es la base de todas nuestras intervenciones, y por eso nuestros gabinetes tienen la relación adecuada de "número de profesionales por paciente".

¿Qué tipo de problemas ayudáis a solucionar?

Ansiedad

Si sufres de ansiedad de modo ocasional es algo normal que puede pasarle a cualquiera en su día a día. Sin embargo, las personas con trastornos de ansiedad frecuentes tienen preocupaciones y miedos intensos y persistentes sobre situaciones diarias, y sufren episodios de miedo o terror repentinos que pueden desembocar en ataques de pánico.

Estos sentimientos de ansiedad y pánico interfieren con las actividades diarias, son difíciles de controlar, son desproporcionados en comparación con el peligro real y pueden durar un largo periodo de tiempo. Con el propósito de prevenir estos sentimientos o trastornos de ansiedad, puede suceder que evites ciertos lugares o situaciones. Los síntomas pueden empezar en la infancia o la adolescencia y continuar hasta la edad adulta. Lo más recomendable es que acudas a una consulta de psicología de un psicólogo en Málaga especialista en trastornos ansiedad lo antes posible y empieces a sentirte mejor.

Depresión

En ocasiones, todos nos sentimos melancólicos o tristes, pero estos sentimientos, suelen ser pasajeros y se superan en poco tiempo. En cambio, cuando una persona tiene un trastorno depresivo, este interfiere con la vida diaria y afecta al desempeño normal de sus actividades cotidianas.

La depresión se caracteriza por un estado de ánimo bajo y sentimientos de tristeza, asociados a alteraciones del comportamiento, del grado de actividad y del pensamiento. Puede causar ansiedad, insomnio, pérdida de apetito y falta de interés o placer por realizar diferentes actividades, así como afectar a las actividades laborales, escolares y familiares. Por ello, es de gran importancia acudir a un psicólogo en Málaga especialista en depresión para mejorar esta situación.

Trastorno Obsesivo Compulsivo (TOC)

Los pensamientos obsesivos pueden influenciar nuestro comportamiento, lo que puede ser positivo algunas veces. Por ejemplo, pensar que te puedes haber dejado el horno encendido puede hacer que vayas a comprobarlo. Sin embargo, si este tipo de pensamientos son recurrentes puede llevar a un individuo a llevar a cabo comportamientos poco saludables.

El TOC se caracteriza porque el individuo que lo sufre tiene pensamientos, ideas o imágenes intrusivas. Éstos causan ansiedad (obsesiones), y provocan que la persona realice ciertas acciones (compulsiones) para reducir el malestar como, por ejemplo, lavarse las manos, comprobar repetidamente que la puerta está cerrada, contar, organizar repetidamente las cosas, etc. Pide cita ahora con un psicólogo especialista en trastorno obsesivo compulsivo (TOC) en Málaga.

Trastornos de la personalidad

Las personas con Trastorno de la Personalidad pueden sufrir en su día a día de aislamiento social, autodestructivo, compulsivo, y riesgos además de padecer hostilidad, impulsividad o irritabilidad. En su estado de ánimo se encuentran síntomas de altibajos emocionales, ansiedad, culpa, descontento general, enfado, soledad o tristeza. Los síntomas psicológicos se caracterizan por depresión, imagen negativa de sí mismo, megalomanía o narcisismo.

Existen varios tipos de trastornos de la personalidad, y cada uno tiene problemas específicos que afectan a la autoimagen y a los patrones de respuesta ante los demás y ante situaciones de estrés, pero, en general, los pacientes presentan dificultades para relacionarse con los demás y manejar el estrés y/o tienen una autoimagen que difiere de cómo los perciben los demás.

Terapia de pareja

Toda pareja experimenta algún grado de conflicto en su relación. Cuando los conflictos no se resuelven eficazmente, podemos acumular emociones negativas que dan lugar a discusiones recurrentes y dolorosas o a un distanciamiento que nos lleva al rechazo y la soledad. Ir al psicólogo os ayudará sin duda alguna como pareja.

El objetivo de la terapia de parejas es identificar las fuentes de esos conflictos y aprender técnicas eficaces para resolverlos. Se centra en lo que podemos hacer cada uno para mejorar nuestra relación, más que en aquello que debería cambiar el otro. La terapia de pareja es cosa de dos y normalmente es uno el que da la voz de alarma y el otro, al menos, tiene que estar dispuesto a colaborar.

La pareja aprenderá a sentirse de nuevo parte del mismo equipo, a apoyarse e inspirarse mutuamente. Trabajarán para aprender a recuperar el romance y disfrutar de nuevo de su intimidad. En esencia, volver a conectar y reconstruir una vida en común.

Psicología infantil y adolescente

Un aspecto obvio en el que los niños se diferencian de los adultos es que viven un periodo de rápido crecimiento y desarrollo. Además, de los cambios físicos asociados con la maduración, existen importantes cambios sociales, cognitivos y comportamentales que tienen profundas repercusiones para la psicopatología infantil. En Hernández Psicólogos Málaga contamos con el servicio de psicólogo infantil para ayudaros.

La edad se presenta como uno de los aspectos más importantes a tener en cuenta, dado que lo que puede resultar absolutamente normal en una edad determinada puede que ya no lo sea en otra. De hecho, la mayoría de los síntomas de los trastornos infantiles son comportamientos adecuados, o al menos típicos, en las primeras etapas del desarrollo (hiperactividad, inquietud e incluso agresión), al igual que en la etapa de la pubertad. Las normas evolutivas, por ejemplo, son de especial importancia.